prnl Dejarse dominar por afectos, pasiones o vicios: abandonarse a la bebida, a la suerte. Descuidar los intereses, las obligaciones, el aseo personal o la compostura: se ha abandonado mucho. Rendirse ante las adversidades: debe luchar contra su enfermedad y no abandonarse. 'abandonar' aparece también en las siguientes entradas:
20 Y los que pagan mal por bien se me oponen, porque yo sigo lo bueno. 21 No me abandones, oh SEÑOR; Dios mío, no estés lejos de mí. 22 Apresúrate a socorrerme, No me abandones cuando decae mi vigor» (Sal 71,9) "No esconder la vejez, no esconder las fragilidades de la vejez. Esta es una enseñanza para todos nosotros".

Epílogo "A los justos y humildes, Dios los ensalza: a quienes son soberbios, Él los rechaza." De todos estos bellos versos podemos aprender mucho y crecer. Aquí se compilaron todas las enseñanzas de Don Juan Manuel, de boca de Patronio, en un hermoso viaje a la consciencia humana. Por María Fernanda Figueroa Estrada.

9Es tu rostro, Señor, lo que yo busco, no me escondas tu cara. Con enojo a tu siervo no rechaces; eres tú mi defensa, ¡no me abandones, no me dejes solo, mi Dios y Salvador!' 10 Si me abandonaran mi padre y mi madre, me acogería el Señor. 11 Enséñame, Señor, tus caminos, y guíame por sendero llano. 7 Señor, oye la voz con que a ti clamo, escucha, por piedad. 8. Mi corazón de ti me habla diciendo: "Procura ver su faz". 9. Es tu rostro, Señor, lo que yo busco, no me escondas tu cara. Con enojo a tu siervo no rechaces; eres tú mi defensa, ¡no me abandones, no me dejes solo, mi Dios y Salvador! 10. Asídio paso a la escritura de “Por favor no me abandones”, película que llega este fin de semana de manera independiente a salas mexicanas, protagonizada por Valentina Sumavsky. La cinta Lacabeza canosa es corona de gloria, y se encuentra en el camino de la justicia. ``Delante de las canas te pondrás en pie; honrarás al anciano, y a tu Dios temerás; yo soy el SEÑOR. Aun hasta {vuestra} vejez, yo {seré} el mismo, y hasta {vuestros} años avanzados, yo {os} sostendré. Yo {lo} he hecho, y yo {os} cargaré; yo {os Malditoel hombre que abandona a sus hijos Biblia. La Biblia es clara en su enseñanza sobre el hombre que abandona a sus hijos: es considerado maldito. En el libro de Deuteronomio 27:20, se dice: «Maldito el que depravare el derecho del extranjero, del huérfano y de la viuda. Y dirá todo el pueblo: Amén». AdLhCD.
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